Como se vive, se muere

El asesinato del presidente de España marca el comienzo de una investigación policial liderada por el inspector de homicidios Manuel Hernández y sus tres compañeros (April Piélagos, Marcos Kors y Hugo Sáez). Hay un asesino en serie suelto en la ciudad de A Coruña que deja refranes en las escenas del crimen firmados con su seudónimo, Erio. Sus víctimas son piezas de un complejo puzle cuyos enigmas se deberán interpretar de la manera correcta; de lo contrario, jamás podrán visualizar la imagen completa, no logrando atrapar al responsable. La venganza es un plato que se sirve frío, y, cuando el dolor y la ira se entremezclan, la explosión derivada de su unión puede hacer temblar los cimientos de la propia cordura.